En un partido de muchos batazos de largometraje y de muy mal pitcheo, los Saraperos de Saltillo arrancaron la serie ante los Bravos de León con un triunfo de 17-22 en el Estadio Domingo Santana, no es un error, así de abultada terminó la pizarra del compromiso entre los norteños y los del bajío.
Los Dragones del Norte abrieron la tarde con rally de cinco en la primera entrada, producciones de Rainel Rosario, Henry Urrutia y Missael Rivera parecían definir todo desde el inicio. Pero los Bravos respondieron con una en la primera y con tremendo racimo de seis anotaciones en la segunda baja, dando una pequeña probada del carreraje que vendría en el camino.
Edgar González (Saraperos) apenas lanzó por espacio de una entrada y un tercio, recibiendo un complete de seis carreras y dejando el encuentro perdido. Después de una labor titubeante de Iván Izaguirre, sería Martín Buitimea el relevo de los verdes a partir de la segunda entrada, llevándose la victoria sin tener una salida brillante.
A pesar de que Buitimea permitió dos carreras, los del Sarape remontaron parcialmente en la quinta entrada con un nuevo rally de cinco que los puso arriba por 9-13. La pizarra se movió de nuevo hasta la fatídica con un panorámicos brutal de dos producciones de Missael Rivera para los saltillenses.
El octavo rollo trajo dividendos para ambos equipos, para los coahuilenses llegarían tres anotaciones, gracias a un triple de Fernando Villegas y a los sacrificios de Rainel Rosario y Dariel Álvarez. Los guanajuatenses dieron señales de vida con una seguidilla de seis rayitas, misma que fue orquestada por el grand slam de Daniel Sánchez.
En la novena alta, la Nave Verde se apuntó cuatro rayas más a la cuenta para liquidar el compromiso, Fernando Villegas pegó triple que remolcó a Ricardo Serrano y Tomo Otosaka, mientras que, Rainel Rosario descargó bombazo solitario y sin retorno por el prado de la izquierda. Para la anécdota quedó la carrera producida por Joey Terdoslavich (León) en la baja del noveno inning, pues solo sirvió para adornar una pizarra muy alterada.
Este partido se quedó cerca de ser récord, el juego con más carreras en la historia de la pelota azteca es el de los Diablos de México 29-16 Sultanes de Monterrey en la temporada lejana de 1945. Los Saraperos y los Bravos acumularon 39 carreras en el partido que arrancó la tirilla en el bajío mexicano, quedándose a solo 6 carreras de alcanzar una marca histórica.
PIZARRA 1 2 3 4 5 6 7 8 9 C H E
SALTILLO 5 0 2 1 5 0 2 3 4 22 23 1
LEÓN 1 6 1 1 1 0 0 6 1 17 18 1
PG: M. Buitimea (2-3) PP: W. Ramirez. SV: J. Mejía (7).
HR= Sal: H. Urrutia (15), C. Mendívil (5), R. Serrano (8), M. Rivera (8), R. Rosario (26). León: L. Rivero (15), J. Vargas (15), D. Sánchez 2 (3), Okay. Lamas (9), L. Medina (6).
